La casa ibicenca responde a una lógica
arcaica que se mantiene a través del tiempo de un modo ejemplar.
La profunda tradición de estas
construcciones "espontáneas", las más antiguas del mediterráneo, han seducido a lo largo del tiempo a los arquitectos y artistas
que han profundizado en su historia.
Su fuerte presencia nos ha obligado a
reflexionar sobre el modo de actuar en la isla.
Algunas invariantes ibicencas han sido
tenidas en cuenta en nuestro proyecto:
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Construcción de doble muro con cámara, sin aislamientos. Materiales sanos.
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Orientación al Sur de la fachada principal.
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Volúmenes cúbicos blancos de mortero de cal y suelos de terracota.
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Práctica desaparición de ventanas en los paños exteriores.
Los diferentes usos se organizan en módulos independientes
enlazados por un porche de doble orientación.
