El nuevo edificio busca relacionarse con el entorno arqueológico de Mariturri, incorporando:
Una piel de vidrio que evoca las teselas del mosaico romano. Actuando como fachada ventilada, mediante piezas de vidrio templado y pintado al horno en diferentes colores, de 150x50x1 cm. Esta piel protege el aislamiento, permite mantener la cámara ventilada y por lo tanto libre de humedades, y garantiza la ausencia de puentes térmicos.
La vivienda flexible basada en la eficacia y racionalidad de un bloque técnico por unidad que recoge la totalidad de montantes y ventilaciones de la misma, agrupando los locales húmedos. De este modo se suprimen las rozas y las derivaciones mediante una pared técnica industrializada que permite una economía de la puesta en obra, control de plazos y costes, etc.